DIA DEL MAESTRO

YO ACUSO        

    

Armando Vargas Mora

Apatzingán, Michoacán; 16 de Mayo de 2016.- Dicen los economistas que el dinero es una mercancía, la más universal de todas y que sirve como intermediario de éstas para valorar a todas las demás. Por eso, tal vez es que su majestad el dinero, sea el culpable de la mercantilización de los pretextos, porque son estos los que hoy en día, no nada más entre los más notables sea el día de la madre que oficialmente es el 10 de mayo, pero que para efectos prácticos realmente son los 365 días del año, en todas partes y a cada rato, no por el tributo que nos merecen nuestras progenitoras, sino por los pelafustanes e iracundos incultos, groseros y faltos de respeto a lo más sagrado que pueda existir en este mundo.

 

En estas condiciones se han instituido infinidad de pretextos, que el día del padre, del albañil, de la enfermera, del sida, del tabaco, del ingeniero, del licenciado, del doctor, ahora salieron que también la democracia tiene su día, del veterinario, también ahora nos dicen que hay día del agua lo cual es una mentira en vista de que aquí se celebra todos los días, principalmente sobre la Av. Constitución de 1814, bueno, infinidad de pretextos y desde luego, no podría faltar EL DÍA DEL MAESTRO, a este es al que nos vamos a referir.

AURELIO NUÑO MAYER.- ¿REFORMA EDUCATIVA O ASPIRACIONES POLITICAS?
AURELIO NUÑO MAYER.- ¿REFORMA EDUCATIVA O ASPIRACIONES POLITICAS?

En 1917 se propuso ante el Congreso de la Unión que el 15 de mayo fuera instituido como EL DÍA DEL MAESTRO. El respectivo decreto fue firmado por el presidente Venustiano Carranza y se conmemoró por primera ocasión el 15 de mayo de 1918.

 

Recordamos que hace muchos años, en todos los confines de nuestro querido México, había tres personajes principalmente, que eran muy respetados: El sacerdote, el médico y el maestro.

 

Eran tiempos en que para ser maestro, no se ocupaba la licenciatura como hoy en día. ¿Cuál evaluación? ¿Cuáles marchas? ¿Cuáles derechos humanos? ¿Cuál kínder para ingresar a las primarias? ¿Cuál enojo de los padres, si la letra con sangre entraba? ¿Cuáles cooperativas con la engañifa a los alumnos y el consabido reparto de las utilidades del negocio entre maestros?

 

Los maestros tenían un lugar preponderante en la sociedad, en su inmensa mayoría personas respetadas y respetables, con una dedicación y un  apostolado a toda prueba. Su herramienta no la constituía una tableta que le robaba el cerebro al chamaco. El ábaco, el pizarrón, un gis y el borrador que no pocas veces servía PARA EVALUAR AL MAESTRO su condición de pitcher, eran sus instrumentos indispensables. ¿Cuál calculadora? ¡NO!, los cuadernos, en la parte posterior traían las tablas de multiplicar que, hay de aquel que no se las aprendiera en determinado tiempo. En tercer año deberíamos saber sacar una regla de tres simple y quebrados, desde luego las operaciones fundamentales. Hoy he conocido chamacos, alumnos de un zángano “maestro” que es también “director” de la escuela de la presa de Acahuato, que van cursando el cuarto año de primaria sin saber leer, porque por política gubernamental, por “órdenes superiores” no se pueden reprobar alumnos del primer grado, es la explicación que dan, y así se la van llevando porque de lo contrario los padres no recibirán la ayuda económica que el gobierno les brinda, las ayudas sociales. ¡ESE ES EL AVANCE QUE HA TENIDO NUESTRA EDUCACIÓN EN MÉXICO!

 

Es triste y lamentable el descuido y abandono en que se encuentra nuestra educación, los culpables somos todos, nosotros por no estar al pendiente y exigir que nuestros hijos cumplan con sus obligaciones educativas, nuestros hijos por razones obvias ya que se encuentran más ocupados atendiendo su Facebook, las redes sociales y cuestiones de sexo, en lugar de cumplir con sus planes de estudios y sus tareas que tienen que enviar normalmente al correo de sus mentores, la parte humana ha quedado relegada, en el pasado, en el olvido. El apostolado lo hay, hay que reconocerlo, son muchos los maestros que tienen que trasladarse hasta lugares cerriles inclusive, maestros que no cuentan con las instalaciones óptimas, bueno, ni siquiera fundamentales para el desarrollo de sus funciones, lugares que no cuentan con sanitarios para que los alumnos y maestros cumplan con sus necesidades fisiológicas. Pero también existe la percepción del maestro que aparece en TV haciendo actos de vandalismo, el que suspende clases, el que no le importan los derechos de los niños a recibir su educación constitucional.

JUAN DIAZ DE LA TORRE.- TRAIDOR Y COBARDE.
JUAN DIAZ DE LA TORRE.- TRAIDOR Y COBARDE.

Hoy el sindicato y la coordinadora se han convertido en una loza muy pesada para el país, unos maestros que defienden sus conquistas laborales, una sociedad que no sabe bien a bien en qué consiste la reforma educativa y un  gobierno que, esto último es lo que menos le importa, al presidente Enrique Peña Nieto y al secretario de educación Aurelio Nuño Mayer, ayer les importó más, en el acto protocolario por el día del maestro, exhibir a Juan Díaz de la Torre, dirigente nacional del sindicato nacional de los trabajadores de la educación, como mono de ventrílocuo o chivo de cristalería que, mencionó palabras que sonaron como una dulce melodía para “las autoridades”, que en explicar claramente para que todos los mexicanos de a pie entendamos de una vez por todas en qué consiste la reforma educativa. Porque la cuestión laboral incuestionablemente es una y hay que cumplirla, y la reforma educativa es otra y también debe cumplirse. ¿O no?

 

Y ya que hablamos de este personaje, de Juan Díaz de la torre, recordamos el hachazo del poder, de cuando el gobierno le partió la madre a la maestra Elba Esther Gordillo Morales. ¿Cuántos la defendieron en el magisterio? Si San Pedro negó a Jesucristo…

 

Cuando la maestra otrora poderosísima se elevó a la categoría de diosa e inalcanzable por el brazo de la justicia, cuando cayó en desgracia en un plan trazado por Alfredo Castillo Cervantes en sus tiempos por la PGR como subsecretario y piedra en el zapato del titular en aquel tiempo, Jesús Murillo Karam, “su sindicato” jamás la defendió, todo lo contrario, solamente fue defendida por quienes se suponía eran sus peores adversarios, por los dirigentes de la CNTE, ellos fueron los que decidieron rechazar la llamada reforma educativa, mientras los presumiblemente “elbistas”, como Díaz de la Torre, optaron por aceptar dócilmente la posición gubernamental, optaron por la comodidad y el confort, por la cobardía y abandonaron el barco de la vergüenza, de los principios y el decoro, ratas asustadas que sintieron que el agua les llegaba al cuello. La verdad es que Gordillo, días antes de ser detenida en una operación orquestada también por otro de sus pupilos, por Miguel Ángel Osorio Chong a quien había ayudado para que llegase a la gubernatura de Hidalgo, cuando se declaró una “guerrera” y dijo que no se plegaría a los designios de ninguna autoridad, en ese mismo momento cavó  su propia tumba, le ganó la soberbia, así lo hemos consignado, a quien conocía a la perfección los entretelones de éste sistema político podrido a más no poder. Su encarcelamiento no dolió a nadie a excepción lógica, de su hija Mónica Arriola Gordillo que murió hace unos cuantos meses, siendo senadora de la república por el partido que fundó su madre, el PANAL, y con la comprensible amargura.

 

El maestro, las añoranzas del pasado, el apostolado, el mercantilismo, el que cumple a cabalidad, el vándalo, el que se va con la finta y permite que grupos de porros les penetren como la humedad en su protestas –genuinas o no- cotidianas, el de las ideas, el de los ideales, el borrego, el que tiene que asistir a las marchas para alcanzar los puntos suficientes para el siguiente escalafón que les permita tener los ingresos para vivir dignamente,  el de convicciones, el de las aberraciones, el de los errores, el de los aciertos.

 

El maestro a través del tiempo, el del ábaco a la tableta, el de los tiempos en que la hacía de pitcher, a los tiempos de las comisiones de derechos humanos, del que “la letra con sangre entra” a la ira de padres de familia y desde luego la intervención del ministerio público. Cuestión de épocas.

 

¿Cuántos alumnos había aquel 15 de mayo de 1918, fecha de la primera celebración del día del maestro? Lo ignoramos.

 

Pero hoy el Instituto Nacional de Estadística y Geografía nos dice que en la actualidad existen un millón seiscientos mil maestros aproximadamente en el país de los cuales el 60% son mujeres y el restante 40% hombres. El 7% de ellos habla algún dialecto.

 

El maestro, incuestionablemente los hay virtuosos, como con imperfecciones.

 

 

Sobre Armando Vargas Mora 223 artículos
Contador y analista político

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